LA EDUCACIÓN COMO HERRAMIENTA DE INCLUSIÓN Y MOVILIDAD SOCIAL

Autores/as

  • José Garzón Maceda Universidad Nacional de Misiones

Palabras clave:

Políticas Sociales, educación, terminalidad educativa, combate de la pobreza, articulación p´ública-privada

Resumen

La educación juega un importante papel en el desarrollo de los territorios al constituirse en herramienta fundamental de movilidad social y combate de la pobreza, siendo un derecho humano fundamental, especialmente reconocido para niños y niñas entre los objetivos de la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 de las Naciones Unidas. Por ello, el garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad debe ser un tema prioritario en las agendas de gobierno a fin de evitar la deserción escolar temprana, ya que es probado que la enseñanza primaria es fundamental para lograr el descenso de las tasas de natalidad, la reducción de la pobreza y la realización personal de todos los individuos (Astorga, 2007). Estudios de las Naciones Unidas demuestran que en promedio los niños del 20% de los hogares más ricos logran mayores niveles de competencia que los niños del 20% de los hogares más pobres, los cuales ni logran completar la formación (UN, 2015). Un reflejo de esta situación se detecta en barrios periféricos del Municipio de Garupá y Posadas (Misiones, Argentina) con la presencia de un alto índice de deserción escolar (23%) motivado por: (a) la situación económica desfavorable de las familias que obliga al trabajo infantil, (b) falta de acompañamiento y contención a los estudiantes, (c) problemas de tipo nutricional en la población infantil y (d) deficiencias de capacidad en las escuelas para dar cabida a las necesidades de un grupo numeroso de alumnos. Ante esta situación, desde el año 2009, la organización “Participación Ciudadana” impulsa en dicha zona, en trabajo articulado con otras organizaciones público - privadas, un “Programa de Apoyo Escolar” orientado a la ayuda y contención sanitaria, nutricional y psicopedagógica de niños en edad escolar y sus familias, como complemento de la educación formal. A lo largo de casi 10 años de funcionamiento, el Programa consigue movilizar a más de 1200 niños en los Centros de apoyo creados en los Barrios Santa Clara II y Prosol I, logrando que el 95% de los mismos puedan continuar y terminar sus estudios.

En relación con lo mencionado, el presente trabajo, a través de la sistematización de la experiencia mencionada, reflexiona sobre el rol de las organizaciones sociales como complemento activo de los Gobiernos en la ejecución de políticas sociales - en este caso en materia de educación primaria - que conlleven al combate de la deserción escolar y su principal efecto de largo plazo: la pobreza.

Publicado

2020-07-17